¿Qué Haremos, Tú Y Yo?

He recibido comentarios de diversas fuentes... He pensado bastantes ideas... Y aún creo que me entristecería volver a saber de ti... Sin embargo, tu mirada y mi soledad quieren tomarse de la mano... Eres tan perversa...

Un pensamiento que va más allá de mis creencias y desilusiones. Existen muchos sentimientos orientados a la amargura y desamor, que quizás no debería hablar en pos de su existencia... Me atreveré de todos modos...

Cuando se está en una relación, ambas partes deben estar en una situación romántica y de respeto (eso dicen), pero por desgracia, dos espíritus merodean y amenazan con destruir la armonía de lo hermoso que puede ser besar y abrazar a una pareja deseada... El Señor CELOS y su mujer, la Señora INSEGURIDAD.

No... Dejen que su amor se destruya por algo tan cruel y siniestro... Aunque suene estúpido de mi parte (un joven con experiencia nula en el placer de la conquista antigua) Pero gracias a la sabiduría adquirida por tantas "rupturas en la válvula de sangre", he descubierto que estos fantasmas acaban con la pureza y brillo de los ojos de una dama tan pronto y tan eficazmente... El ser celoso, a mi juicio, es encantador en ciertos momentos (sobre todo cuando te adoran y temen perderte)... PERO (la parte melancólica) no sólo de mi opinión vive esta entrada... No hablamos sobre lo que me satisface a mí, sino lo que quiero hacer por mis lectores.

No perezcan por estas desdichas, porque al ser inseguro (frío y silencioso martirio que aniquila el alma) terminas con lo poco que en verdad poseías y anhelabas... No temas por que tu pareja pueda abandonarte... Si lo hiciera, como muchos lo saben, no era lo que en verdad llamaste alguna vez amor...

Intenten hablar con su voz interior... En verdad, escúchenla. Pero no está demás hablar con tu compañero... Hehehehe...