"Eventualmente, amigo mío..."

El tiempo se ha detenido para tomar un descanso...

domingo, 30 de octubre de 2011

A 6 Años Del Ocaso

“¿Dónde estás? ¿Qué estupidez me hizo perder todo tu amor? Jamás entendí todas las indirectas que me hacías. Estaba tan ciego con el amor que confiaba tenía de tu parte... Sólo fue un espejismo. Y ahora que he perdido hasta mis recuerdos, no me queda sino llorar amargamente cual niño que ha sido castigado por vez primera. Éste será mi castigo ahora. Una tumba de tristezas y olvido. La sombra de aquél pasado tan hermoso... Hecho pedazos y arrancado del fantasma... Todo se fue a un abismo carente de principio y fin...”


- ... Era entonces un tiempo diferente. No hagas caso de palabras
torpes sobre la igualdad de las costumbres. Creas o no, sí cambia
todo esto. 
- Eso es lo que trato de olvidar. El sonido de una frase optimista...
- Harás bien. Mira, en esta planeta, todos tenemos asuntos qué
atender. Jamás estamos quietos aunque descansemos o durmamos. 
En esencia, hacemos muchas cosas todo el tiempo. Para olvidar tu
dolor, dedícate a algo interesante que sobresalga en tu monotonía.
- ¿Y qué puede ser eso?
- No lo sé. Apenas si te conozco, niño. ¡No me molestes!
- Pero aún no entiendo sus palabras. No me deje así, ¡por favor!
- Nada más puedo hacer por ti. Eres necio por escuchar tus quejas
todo el tiempo, y más por escucharme a mi.


- ¿Es ésa tu idea de un amor perfecto?
- No... Yo no sé qué sea eso realmente... Perdí su significado hace
no mucho, pero ya es un tiempo.
- Tu problema, joven amigo, radica en las cosas que dices.
Siempre debes pensar lo que vas a decir. De lo contrario, las ideas
y la belleza no existirían, ¿verdad?
- Sigo bastante perdido... No entiendo a mis maestros, básicamente.
- ¡Pero no hay nada qué entender! ¡Escúchate primero!


- ... Ése, creo yo y mucha gente, es mi problema fundamental.
- Yo no puedo ayudarte con eso.
- ¿Pero por qué no? Eres un ser humano como yo; tienes sentimientos
y razón, como yo, y por desgracia, estás vivo.
- Si. Pero con una gran diferencia.
- ¿Cuál?
- Que mi felicidad es el fin de la vida de otros. Si yo quisiera, podría
matarte ahora mismo. Vaya, ni siquiera debería hablarlo con un
perdedor como tú.


“Se me obliga a regresar. Lo que voy a encontrar me hará volver a donde empecé, sin embargo, después de tanto tiempo en este desierto, he entendido que las personas carecen de honestidad y tienden a alabar sus propias mentiras. Ahora es mi turno de dialogar con franqueza...”

No hay comentarios.:

Publicar un comentario