Oración

Ya no fue tan divertido burlarme de las personas. Todo tenía motivos de existir, puesto que se asomaba por los edificios una silueta ennegrecida. Muchos pensaban que en vehículos potentes podría salir del negocio, pero nada permitía el cometido de la mancha.

A los pocos minutos que corría, mi respiración comenzó la común sincronía con el entorno. El sudor frío estaba sobre mis ojos y no recuerdo dónde tenía mi teléfono. Era evidente que no salir a correr por las mañanas me había dado ese... "Toque" para resbalar más a mi gusto. Pero la ansiedad era más latente que mis frustraciones orgánicas. Para mi suerte, la gente se empujaba brutalmente hacia adelante... Quizás por eso me era un poco más sencillo escabullirme (aunque suene ilógico, no hay tiempo para la gramática).

Pasaron algunos momentos cuando ya estaba algo fastidiado y aterrorizado. El fin era inminente y no tenía un refresco para humedecer la garganta. Ya estaba cansado de huir. Obviamente, el temor me daba más energía, pero todo tiene un límite, y mis pies estaban demasiado de acuerdo conmigo. Afortunadamente, esta siniestra sombra era algo lenta (es un alivio en un momento de crisis, ¿No es así?), así que decidí algo un poco más...coherente.

Cuando salí para mofarme de los civiles, estaba cercano a una estación de autobuses. Afortunadamente, la caminata que había recorrido era la misma ruta que las máquinas seguían a diario, y recordé que una iglesia cristiana estaba a la vuelta de donde me encontraba. ¿Por qué no ir? Digo... No era creyente devoto, pero esto ameritaba algo de fe. Entonces no lo pensé de nuevo.

Es normal que se piense que en medio de una persecución de esta magnitud, detenerse era un acto suicida, pero no para Dios; si se entraba a su templo, era seguro estar a salvo. Bueno... Eso pensamos algunos ancianos y yo. Adentro, pude observar lo que era común en caso de emergencia: Un grupo moderado de hombres y mujeres llorando y suplicando misericordia.

Me era difícil hacer tal acción, y más si ese ardor electrizante pasaba por mi espinazo una y otra vez. Lo que hice al armarme de valor fue moverme rápidamente entre los fieles y posarme al frente de la cruz. Bajar un poco mi mojado cráneo y cerrar los ojos. Es preciso comprender que un lugar así era necesario entre las personas, pues es lo único que mantiene la fe en el entorno. Mi último recurso por ser un bastardo...

"This is the way I pray...
Living just isn't hard enough,
burn me alive, inside.
Living my life's not hard enough,
take everything away..."
                               Disturbed "Prayer"